Los talones agrietados son una clara señal de deshidratación y falta de cuidado en los pies, también pueden ser causados por estar de pie durante largas horas, la exposición continua al agua, el sobrepeso y usar calzado inadecuado y no solo le dan un mal aspecto a tus pies, si no que, en algunos casos, pueden sangrar y causar infecciones y dolor. Pero no te preocupes, existen diversos remedios naturales que le devolverán a tus pies su hidratación y belleza.

Limón

Las propiedades del jugo de limón pueden utilizarse para limpiar la piel muerta de los talones. Se deben añadir unas gotas de jugo de limón en agua tibia y sumergir los pies en esta solución durante unos minutos. Luego frota suavemente con la ayuda de un cepillo o piedra pómez, seca y aplica una crema hidratante.

Aceite de coco

El aceite de coco no sólo ayuda a la piel a retener el agua, sino que también elimina las células muertas. Masajéa tus pies con aceite de coco todas las noches y utiliza calcetines para dejarlo actuar. También puedes sustituir el aceite de coco con manteca de cacao.

Miel  de abeja

Puedes remojar tus pies en una mezcla de agua tibia y una taza de miel durante media hora, luego utiliza un cepillo o piedra pómez para deshacerte de las asperezas. Enjuaga bien y utiliza un crema humectante.