Los dolores de espalda son un padecimiento muy común y tienen diversas causas, las más comunes suelen ser la mala postura, malos hábitos y la falta de ejercicio, aunque también, este dolor lumbar se puede deber a sobrecargas consecuencia del levantamiento excesivo de cargas pesadas o a enfermedades de generativas como la artrosis o la osteoporosis.

Como sabemos lo molesto e incomodo que este dolor, por leve que sea, se puede llegar a volver, te presentamos 5 consejos que te ayudarán a disminuirlo e incluso aliviarlo.

1. Cuida tu postura

Una buena postura es esencial para tratar este tipo de padecimientos, adquiere una postura correcta al estar frente al tv o la computadora, al sentarte apoya tu espalda, párate erguido y evita todo lo posible el levantar objetos pesados.

2. Haz ejercicio

Esta es una de las mejores prevenciones para que los dolores de espaldas no aparezcan, ya que al fortalecer el tronco y las articulaciones, combatirás el dolor. Realiza ejercicios de bajo impacto como la natación, pilates o yoga.

3. Utiliza compresas calientes

Estas son muy útiles para reducir el dolor y la inflamación. Puedes utilizar compresas o darte baños de agua caliente, no solo relajarán tus músculos, si no que aliviarán el estrés. Los masajes también son una buena opción ya que relajan y alivian la tensión en la espalda.

4. Evita el reposo total

A menos que el dolor sea incapacitante, evita permanecer en la cama todo el día, trata de llevar tu día a día como de costumbre, evitando por supuesto levantar objetos pesados y movimientos bruscos y realizando ejercicio de manera moderada.

5. Cuida tus hábitos

El sobrepeso juega un papel importante en este tipo de padecimientos ya que entre más peso, especialmente en el área abdominal, más sobrecarga se aplica a los músculos lumbares. El fumar también puede afectar, ya que fumar reduce el flujo sanguíneo a la zona lumbar y causa que los discos vertebrales se degeneren.

5. Descansa

Un buen descanso es indispensable para una buena salud, ya que ayudará a evitar dolores de espalda y cuello. También debes tener en cuenta una buena postura al acostarte para que la columna se relaje, un colchón firme y una buena almohada.

Si tu dolor es demasiado intenso, lo mejor es que acudas al médico, nunca te automediques.